En este post vamos a contar la verdad que hay detrás de este mito. Uno de los métodos más populares para blanquearse los dientes en casa es con bicarbonato de sodio. En internet aparecen bastantes reseñas que aseguran su eficacia, pero ¿qué tan cierto es eso?
El bicarbonato de sodio tiene propiedades abrasivas y capacidad de eliminar manchas
superficiales. Al ser granulado ayuda a quitar residuos adheridos a los dientes, lo que puede dar una apariencia más limpia instantáneamente. Esto confunde a la gente y lleva a la creencia de que esta opción casera es eficaz.
¿Es seguro blanquear los dientes con bicarbonato?
No es un blanqueador dental profesional, usarlo de manera frecuente puede provocar daños. Estos son varios motivos por lo que no es recomendable:
– Desgaste del esmalte dental.
Como hemos dicho antes, el bicarbonato es abrasivo, con el tiempo puede dañar el esmalte, desgastarlo y este no se regenera, lo que aumenta la sensibilidad dental y el riesgo de caries.
– Resultados limitados.
El bicarbonato solo actúa en manchas superficiales, ni aclara el color natural ni
elimina la decoloración profunda.
– Daño a las encías.
Si utilizas de forma continua el bicarbonato puede llegar a irritar y dañar la encía provocando sensibilidad e inflamación.
En conclusión, blanquearse los dientes con bicarbonato puede parecer una gran idea, pero supone varios riesgos. Si lo que quieres es un blanqueamiento seguro y eficaz, consulta a un especialista. Una sonrisa muy blanca no es sinónimo de sonrisa sana.